Guía: Cómo trasplantar de germinador a un medio de cultivo

Guía: Cómo trasplantar del germinador a un medio de cultivo

Ultima Actualización 13/Mar/2024

Escrito por: Lic. Mauricio Valencia

Tiempo de lectura de 5 minutos

Compartir en
Redes Sociales:     

                       

Objetivo: Compartir una manera sencilla para trasplantar nuestras plantas del germinador a las bolsas para vivero, maceta, cama de cultivo o cualquier otro medio final de desarrollo una vez que las plantas han alcanzado el tamaño ideal.

El trasplante es un proceso del que depende el éxito de algunos cultivos, y debe de hacerse rápido, ya que es un momento donde la planta sufre mucho estrés.

Hay quienes prefieren realizarlo en la mañana para que la planta se adapte más rápido a la intensidad solar y hay quienes prefieren en la tarde para que las plantas tengan tiempo de recuperarse por la noche.

Nota: Un trasplante NUNCA debe de hacerse cuando el sol pegue con toda su intensidad.

Una vez que nuestras plantas han alcanzado el tamaño ideal para ser trasplantadas, es necesario tener todos los materiales listos para agilizar el trasplante.

Procura tener a la mano lo siguiente:

a) Bolsas para vivero, maceta, cama de cutlivo o contenedor donde se vaya a desarrollar tu cultivo.

b) Sustrato Hidropónico o Tierra para Siembra.

c) Agua para humedecer el sustrato

d) Abate lenguas o un objeto delgado para sacar las plantas del germinador sin lastimarlas.

Si no estás familiarizado con los términos que estamos mencionando, consulta nuestra Guía: Materiales Básicos para Comenzar un Cultivo Hidropónico para saber más sobre ellos.

Preparar las bolsas para Cultivo

Lo primero que vamos a hacer es agregarle agua a nuestro sustrato, ya que es mucho más fácil manejarlo cuando está húmedo, y así deja de soltar polvos que resultan muy molestos a la hora de trasplantar.

Nota: Depende el sustrato que elijas es la cantidad de agua que utilizaras.

Vaciar el Sustrato en la bolsa para cultivo

Lo siguiente es vaciar nuestro sustrato en la bolsa o medio para cultivo, colocando suficiente sustrato para que la planta pueda desarrollar bien su raíz.

Si vas a sembrar en bolsas para cultivo, el espacio que te sobre de tu bolsa doblalo hacia fuera, esto le dará resistencia a tu bolsa, así como también permitirá que entre más luz a tus plantas.

Drenar el Exceso de Humedad

En el caso de las bolsas de cultivo, hay que perforar 2 agujeros a unos 5 cm de la base de la bolsa para cultivo, uno de cada lado. Dichas perforaciones permitirán que el exceso de agua pueda salir.

No hay que perforar la parte inferior, ya que queremos que siempre haya agua de reserva en la base por si algún día se nos olvida regar nuestra planta.

En el caso de sembrar en una maceta, en su mayoría estas ya cuentan en su mayoría con perforaciones en la parte inferior. En cuanto a las camas de cultivo, es recomendable hacerle una o dos perforaciones a la misma altura de la bolsa para cuestiones de drenaje.

Cavar el hoyo para Plántula

Con nuestra mano o una pala de jardín, podemos hacer un hoyo en donde vamos a trasplantar nuestra planta. Procura que sea suficientemente profundo para que las raíces de nuestra planta tengan buen espacio para continuar desarrollándose.

Retirar la planta del Germinador

Retirar la planta del germinar es el paso más difícil del trasplante. Hay que hacerlo con cuidado para no lastimar a la planta ni sus raíces.

Para retirar la planta del germinador, vamos a introducir nuestro abate lenguas por cada orilla de la cavidad para aflojar el sustrato, también podemos picar por debajo del germinador.

Nota: Hay que tener mucho cuidado de no lastimar las raíces y procurar no manipularlas mucho.

Rápidamente, vamos a colocar la planta en el orificio que creamos en la bolsa para cultivo.

Hay que procurar que sus raíces estén bien estiradas para que puedan absorber mejor los nutrientes una vez que se encuentren en el sustrato.

Cubrir de Sustrato nuestra Planta

El siguiente paso es cubrir todo alrededor de la planta con sustrato, y así quede bien sujeta teniendo un buen soporte, procura dejar plano el sustrato, pero no lo compactes.

Nota: Es normal que nuestra planta se vea decaída después de un trasplante.

Durante un día vamos a regar nuestra planta trasplantada con agua para rehidratarla después del trasplante.

Una vez que hayamos trasplantado nuestra planta, procura que el sustrato esté siempre húmedo pero no empapado.

Una vez que nuestra planta esté recuperada, ya podemos comenzar nuestros riegos con la Solución Nutritiva para que la planta pueda continuar con su desarrollo.

Si tienes dudas, consulta nuestra guía ¿Qué es la Solución Nutritiva? Tipos y cómo elaborarla.

Se recomienda regar una vez al día si el clima es templado y dos cuando es época de calor.

Si te gustó este artículo, te recomendamos las siguientes guías:

¿Qué es la Solución Nutritiva?

La importancia de monitorear y regular el PH

¿Qué es un sustrato?

Guia definitiva para el Cultivo Hidropónico. Los 7 puntos clave

Huerta en Casa: Ideas para diseñarla e incluir Hidroponía.

Compartir en
Redes Sociales: