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Guía: Tipos de plagas en cultivos
Tiempo de lectura 16 min
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Dentro de los factores más importantes para el desarrollo de nuestro cultivo está el control de plagas y enfermedades. El saber qué es y cómo identificar una plaga o una enfermedad en nuestros cultivos es muy importante.
¿Qué es una Plaga?
Una plaga se puede definir como todos aquellos seres vivos que compiten con el hombre en la búsqueda de agua y alimentos, dañando la salud, bienestar y recursos, en espacios en los que se desarrollan las actividades humanas como la agricultura.
Sin embargo, a pesar de lo que nos indique su definición, no todas las poblaciones de animales que se alimentan de plantas en un campo agrícola constituyen una plaga, ni todas las plagas presentan la misma gravedad o persistencia en sus daños.
¿Cómo evitar las plagas en los cultivos?
Las plagas pueden ser un problema serio en los cultivos, pero hay varias medidas sencillas que puedes tomar para prevenirlas:
TENER LIMPIO NUESTRO CUTIVO: No solo es el eliminar regularmente las malas hierbas, si no también restos de cultivos anteriores, hojas y frutos caídos del piso; ya que todo esto puede atraer plagas.
TENER PODADO NUESTRO CULTIVO: la poda adecuada puede ayudar a prevenir algunas plagas en los cultivos. Al podar ramas o hojas infectadas por enfermedades o plagas, puedes prevenir que la plaga se propague al resto de la planta o a otras plantas cercanas.
Además, la poda ayuda a mejorar la circulación del aire y reducir los espacios de reproducción potenciales para algunas plagas, lo que puede hacer que sea más difícil para ellas establecerse en tus plantas.
Consulta nuestra Guía de Poda: Estrategias para Flores y Frutos Saludables para más información al respecto.
USO DE BARRERAS FÍSICAS: Las barreras físicas actúan como una barrera física real que impide que las plagas lleguen a tus plantas.
Por ejemplo, las mallas para campo como las malla anti áfidos y mallas anti trips pueden proteger tu cultivo contra insectos voladores, las mallas ground cover protegerlas de malas hierbas y plagas que vienen del suelo y los túneles e invernaderos que no solo protegen los cultivos del mal clima e insectos; si no también de pájaros que puedan dañar los frutos.
USO DE TRAMPAS PARA PLAGAS: Las trampas para plagas son dispositivos diseñados para atraer, capturar o matar insectos y otras plagas. Pueden ser de diferentes tipos, como trampas adhesivas, trampas de luz, trampas de agua, etc. Las trampas funcionan atrayendo a las plagas hacia ellas y luego capturándolas o matándolas, lo que ayuda a reducir la población de plagas en tus cultivos.
Consulta nuestra Guía: Uso de Trampas para control de plagas Agrícolas para más información al respecto.
SEMILLAS DE VARIEDADES RESISTENTES O MEJORADAS: Los cultivos resistentes son variedades de plantas que han sido seleccionadas o modificadas genéticamente para resistir ciertas plagas o enfermedades específicas. Tienen características genéticas que les permiten defenderse mejor contra los ataques de las plagas.
Consulta nuestra Guía: Semillas: Tipos, clases y variedades para más información al respecto.
ROTACIÓN DE CULTIVOS: Si es posible, alterna los cultivos en diferentes áreas de tu instalación para evitar que las plagas se establezcan. La rotación de cultivos ayuda a interrumpir el ciclo de vida de las plagas y enfermedades que afectan a ciertos cultivos.
También, al cambiar los cultivos, se reduce la acumulación de patógenos en el suelo y se mejora la fertilidad del mismo.
UTILIZA PRODUCTOS NATURALES PARA EL CONTROL DE PLAGAS: El uso de productos naturales o insecticidas de origen orgánico como parte de una estrategia de manejo integrado de plagas, tiene varias ventajas, como por ejemplo que los productos naturales tienden a ser más selectivos en su acción, lo que significa que afectan menos a los insectos beneficiosos y otros organismos útiles en tu cultivo.
También, son más seguros de usar que los productos químicos sintéticos y tienen menor riesgo de que las plagas generen resistencia a sus compuestos, como si la tienen los pesticidas químicos.
BUEN MANEJO DEL RIEGO: Manejar el sistema de riego adecuado, así como las dosis de riego adecuadas evita que las plantas sufran estrés hídrico, lo que las hace más saludables y resistentes a las plagas y enfermedades, ya que... las plantas estresadas SIEMPRE son más susceptibles a las plagas.
Además, el riego adecuado puede ayudar a prevenir la propagación de enfermedades fúngicas y bacterianas que se favorecen en ambientes húmedos. Consulta nuestra Guía: ¿Qué es el riego? si quieres más información.
Recuerda que una planta que se encuentra saludable en un ambiente limpio, con la temperatura y humedad adecuada y cuyos riegos son los adecuados, no tiene por qué atraer a depredadores.
Si quieres conocer medidas adicionales sobre la prevención de plagas y enfermedades en tus plantas, te recomendamos consultar nuestra guía: "Métodos de control fitosanitario del Cultivo : Prevención" para que puedas conocer más a detalle sobre estas y diferentes estrategias.
TIPOS COMUNES DE PLAGAS EN LOS CULTIVOS:
Existen una amplia variedad de plagas que pueden afectar a los cultivos, incluyendo insectos, ácaros, nematodos, enfermedades causadas por patógenos y malezas. Aquí hay una descripción general de los tipos de plagas más comunes en los cultivos:
INSECTOS: Los insectos son una de las plagas más comunes en los cultivos y pueden causar daños directos al alimentarse de las plantas o indirectos al transmitir enfermedades. Algunos ejemplos incluyen pulgones, escarabajos, orugas, trips y áfidos.
ÁCAROS: Los ácaros son pequeños artrópodos relacionados con las arañas que pueden causar daños al alimentarse del follaje de las plantas. Los ácaros más comunes incluyen los ácaros araña y los ácaros blancos.
NEMATODOS: Los nematodos son gusanos microscópicos que pueden vivir en el suelo o dentro de las plantas. Algunas especies de nematodos son parásitas y pueden causar daños a las raíces de las plantas, lo que afecta su crecimiento y desarrollo.
ENFERMEDADES: Las enfermedades causadas por patógenos como bacterias, hongos y virus pueden afectar a los cultivos y reducir su rendimiento. Algunas enfermedades comunes incluyen el mildiú polvoriento, la roya, la mancha foliar y el mosaico viral.
MALEZA O MALA HIERBA: Las malezas son plantas no deseadas que compiten con los cultivos por nutrientes, agua y luz solar. Además de reducir el rendimiento de los cultivos, las malezas también pueden albergar plagas y enfermedades.
Es importante identificar correctamente la plaga que está afectando tu cultivo para poder seleccionar el método de control más efectivo. Además, es fundamental implementar prácticas de manejo integrado de plagas que combinen diferentes estrategias de control para minimizar el impacto de las plagas en los cultivos.
Consulta nuestra guía Fitopatología: Bacterias, Hongos, Virus y Nematodos en Cultivos para más información sobre cada uno de ellos.
Plagas Potenciales sin importancia económica
Son aquellas poblaciones de animales u otros fitófagos que bajo las condiciones existentes en el campo no afectan la cantidad ni la calidad de las cosechas, estas suelen constituir la mayoría de las especies de insectos en un campo agrícola y se presentan en poblaciones bajas o muy bajas, pasando desapercibidas con frecuencia.
Su baja población puede deberse a la presencia de enemigos naturales, variedades resistentes, labores culturales adecuadas o factores climáticos desfavorables para su desarrollo. Si se produce un cambio en estos factores, las plagas potenciales se vuelven plagas reales. Algunos de los más comunes son:
COCHINILLAS HARINOSAS: Las cochinillas harinosas son insectos de la familia Pseudococcidae. Son plagas comunes en muchos cultivos hortícolas, ornamentales y frutales. Se identifican fácilmente por su cuerpo ovalado y cubierto de una secreción cerosa blanca, que les da un aspecto harinoso.
Estas suelen pasar desapercibidas por la eficiente represión que ejercen sus enemigos naturales (mariquitas y avispas parasitoides), pero si estos son destruidos por la aplicación de insecticidas, la cochinilla harinosa se transforma en un problema serio.
PULGÓN DEL MELOCOTONERO (Myzus persicae): Este insecto se alimenta de la savia de diversas plantas, especialmente de cultivos hortícolas. Su baja población también es controlada por enemigos naturales como las mariquitas y las avispas parasitoides.
GORGOJO DEL CAMOTE (Cylas formicarius): Las larvas son las principales responsables del daño, ya que se alimentan del tejido interno del camote, creando túneles que disminuyen la calidad y el rendimiento del cultivo. Los camotes infestados pueden presentar manchas oscuras y áreas podridas.
Esta plaga carece de importancia cuando se acostumbran a realizar rotaciones de cultivos, pero si se adopta la siembra consecutiva del camote en el mismo campo, este insecto se vuelve una plaga muy dañina.
Como podemos apreciar, las plagas siempre estarán cerca de cualquier actividad agrícola que desarrollemos, pueden estar escondidas esperando a que los factores les favorezcan para empezar a multiplicarse, por lo general son animales invertebrados como los insectos (escarabajos), arácnidos o moluscos.
Plagas Ocasionales:
Son poblaciones de insectos que se presentan en cantidades perjudiciales solamente en ciertas épocas o años, suelen estar asociadas con factores climáticos, variaciones en las prácticas culturales, deficiencia temporal en la represión por enemigos naturales y otros factores. Algunos ejemplos comunes son:
ARAÑA ROJA (Tetranychus urticae): Es un ácaro que se alimenta de la savia de las plantas. Suele aparecer en climas cálidos y secos, causando manchas amarillas en las hojas, que eventualmente pueden caer.
TRIPS (Frankliniella occidentalis): Estos pequeños insectos se alimentan de flores y hojas, dejando manchas plateadas y deformaciones. Suelen proliferar en condiciones de alta humedad.
COCHINILLA ALGODONOSA (Planococcus citri): también conocida como cochinilla harinosa, es una de las especies que más afecta a los cultivos. Esta plaga es especialmente perjudicial en cultivos de cítricos, vides, café, y diversas plantas ornamentales. Se alimenta de la savia de las plantas, causando debilitamiento, clorosis, y caída prematura de hojas, además de excretar una sustancia pegajosa llamada melaza que favorece el crecimiento de hongos como la fumagina, afectando a un más la salud de las plantas. Su control es crucial para evitar pérdidas significativas en la agricultura.
Plagas Claves:
Son especies de insectos que, en forma persistente, año tras año se presentan en poblaciones altas, ocasionando daños económicos a los cultivos, suele tratarse de muy pocas especies, con frecuencia solo una o dos.
Por lo general se trata de plagas introducidas a lugares donde el clima resulta favorable y donde no se presentan sus enemigos naturales eficientes, también de especies nativas de insectos que se han adaptado favorablemente a cultivos introducidos o nuevas variedades de plantas, que resultan particularmente susceptibles. Algunos ejemplos muy comunes son:
MOSCA BLANCA (Bemisia tabaci): Un insecto chupador que debilita las plantas al extraer su savia y transmitir virus. Es una plaga persistente en cultivos hortícolas y ornamentales.
GUSANO COGOLLERO DEL MAÍZ (Spodoptera frugiperda): Ataca el cogollo de las plantas de maíz y otras gramíneas, causando daños severos que afectan el rendimiento del cultivo.
Plagas Migrantes:
Son especies de insectos no residentes de los campos cultivados, pero pueden penetrar en ellos periódicamente como consecuencia de sus hábitos migratorios. Este es el caso de las langostas migratorias y del arrebiatado del algodonero. Se trata de una categoría reconocida como especial y distinta de las anteriores, aún cuando el criterio usado para categorizarla no es el mismo. Los ejemplos más comunes son:
Langosta del desierto (Schistocerca gregaria): Se agrupan en enjambres enormes que pueden devastar campos enteros de cultivos. Su migración y reproducción están influenciadas por condiciones climáticas favorables.
Gusano del ejército (Spodoptera exempta): Esta plaga migra en grandes cantidades y puede atacar varios cultivos, especialmente gramíneas, dejando los campos severamente dañados.
PLAGAS DIRECTAS Y PLAGAS INDIRECTAS DE LOS CULTIVOS
Existen otras dos calificaciones útiles para designar a las plagas según la relación que existe entre la parte de la planta que es dañada por el insecto y la parte de la planta que se cosecha.
Plaga Directa:
Cuando el insecto daña a los órganos de la planta (raíz, tallo, hoja o flor) que el hombre va a cosechar, un ejemplo de ello son las orugas o larvas de la polilla o mariposas, las cuales dañan hojas, tallos o frutas por lo general, o gorgojos que atacan los tubérculos, raíces o bulbos.
PICUDO DEL PLÁTANO (Cosmopolites sordidus): Este gorgojo perfora los pseudotallos de las plantas de plátano, causando daños estructurales que afectan directamente la producción de frutos.
MOSCA DE LA FRUTA (Ceratitis capitata): Las larvas de esta mosca perforan frutas como cítricos y duraznos, causando pudrición y pérdidas significativas en la cosecha.
Plaga Indirecta:
Cuando el insecto daña órganos de la planta que no son las partes que el hombre cosecha, pero no causan daño en el fruto o tubérculo que se cosecha. Algunos ejemplos son:
MOSCA MINADORA (Liriomyza spp.): Las moscas minadoras son insectos que dañan las hojas de diversas plantas, como el tomate y la papa, al excavar túneles en el tejido foliar. Aunque su daño se limita a las hojas y no afecta directamente el fruto o el tubérculo, puede reducir la capacidad fotosintética de la planta y, en consecuencia, su rendimiento.
Áfidos (Aphididae): Los áfidos, o pulgones, son pequeños insectos que se alimentan de la savia de las plantas. Aunque su alimentación no afecta directamente las partes de la planta que se cosechan, como los frutos o las raíces, su daño puede debilitar la planta, reducir el crecimiento y la producción, y transmitir enfermedades virales que pueden tener un impacto indirecto significativo en el rendimiento del cultivo.
PLAGAS SEGUN SU MODO DE ALIMENTACIÓN: CHUPADORES, MASTICADORES Y PERFORADORES
Cada grupo causa daños específicos a las plantas, afectando su crecimiento, desarrollo y rendimiento. A continuación, se presenta una descripción de cada grupo y ejemplos de plagas comunes asociadas a ellos, junto con recomendaciones para su control.
INSECTOS CHUPADORES: Se alimentan de los jugos de las plantas absorbiéndolos. El daño se manifiesta en hojas y tallos amarillentos, marchitos y enraizados.
Si tienes de este tipo de plaga en tu cultivo te recomendamos utilizar insecticidas orgánicos como el Organ Oil elaborado a base de aceites vegetales así como el Bio Capsi.
INSECTOS MASTICADORES: Dejan agujeros en las hojas, en las flores o en los frutos. Poseen mandíbulas bien formadas, con las que trituran los tejidos vegetales, entre ellos están las larvas de lepidópteros (orugas), los adultos y larvas de coleópteros (escarabajos), también están los ortópteros (grillos, chapulines y langostas) y los himenópteros (hormigas).
Si tienes este tipo de plaga en tu cultivo te recomendamos utilizar, Bio Higuer el cual está elaborado a base de aceite de Ricino.
INSECTOS PERFORADORES: Penetran en las plantas. Estas plagas perforan el tallo de la planta o minan túneles angostos dentro de la hoja, el fruto y la raíz. Entre estos animales están las larvas de los dípteros (moscas), de lepidópteros (orugas) y larvas de coleópteros (escarabajos).
Para detectar si una planta está afectada por este tipo de plaga, debemos tomar en cuenta que cuando los insectos comen parte de una planta, dejan agujeros en alguno de sus órganos (hojas, tallos, raíz, flor o fruto) y también dejan residuos cerca del lugar donde se alimentaron (por lo general eses). Estos residuos pueden ser un jarabe azucarado, gránulos, material parecido al aserrín o excrementos oscuros húmedos. Las plantas infestadas por insectos se atrofian o se achaparran.
Otros síntomas que podemos observar por insectos perforadores, es que las plantas se ven poco desarrolladas y no crecen adecuadamente, tienen hojas deformes o dañadas, se ven amarillas, de un color verde ligero o se ven marchitas y caídas.
Si tienes este tipo de plaga en tu cultivo te recomendamos utilizar, Neem All (a base de ajo aceite de neem) y Neem Canela (extracto canela y aceite de neem).
SI YA TENGO PLAGA, ¿CÓMO CONTROLAR LA PLAGA DE MI CULTIVO?
Si ya tienes problemas de plaga en tu cultivo a pesar de aplicar medidas de control, es importante actuar rápidamente para minimizar los daños. Aquí tienes algunas recomendaciones:
IDENTIFICAR LA PLAGA: Es fundamental identificar correctamente la plaga que está afectando tu cultivo. Esto te ayudará a seleccionar el método de control más efectivo.
CONTROL BIOLÓGICO: Utiliza organismos vivos que sean depredadores, parasitoides o patógenos de la plaga. Por ejemplo, puedes introducir insectos beneficiosos como mariquitas o ácaros depredadores.
CONTROL MECÁNICO: Elimina manualmente las plagas. Puedes usar trampas, barreras físicas o sacudir las plantas para desalojar las plagas.
CONTROL QUÍMICO: Utiliza pesticidas de forma selectiva y siguiendo las indicaciones del fabricante. Es importante elegir productos que sean efectivos contra la plaga específica y que no dañen al medio ambiente ni a organismos benéficos.
Si quieres adentrarte en el proceso de control de plagas, consulta nuestra guía: Métodos de control fitosanitario Agrícola: Control y Eliminación donde te guiaremos si estás en esta etapa.
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